Un tramo de costa único en Europa por la densidad de formaciones litorales que reúne, aspirante a Geoparque UNESCO. Entre calas, acantilados e islotes, se aprecia la geología en acción resultando en un paisaje que hace las delicias de los fotógrafos. La plataforma abrasiva de La Arnía y los farallones que se levantan sobre el Cantábrico hacen de esta una playa única.